LA UNER PARTICIPÓ DE LA XIII CONFERENCIA INTERNACIONAL DE ARROZ PARA AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

Cesar Quintero, Docente de la Facultad de Ciencias Agropecuarias de la UNER junto a María Zámolo y Joaquín Panozzo, participaron de la XIII Conferencia Internacional de Arroz para América Latina y el Caribe realizada en Piura (Perú).

 “Es una conferencia que organiza el Fondo Latinoamericano para El Arroz de Riego, una entidad que está en Colombia y es la más importante en genética de arroz de riego. La misma se realizó del 14 al 18 de mayo, contó de tres días de sesiones plenarias y un día de campo. En esta oportunidad participaron distintos especialistas de diferentes partes del mundo enfocando el eje en la sustentabilidad del cultivo”- sintetizó el ingeniero en dialogo con Campo en Acción.

Sabemos que el arroz tiene varios problemas económicos, dado que es un cereal muy sensible para la alimentación del mundo y relativamente siempre tuvo un precio más bajo que otros cereales más liberados a otros mercados y eso afectan la competitividad del sector. En cuanto a la sustentabilidad del sistema pasa por el alto uso de agua, energía, fertilizantes, esas son algunos de los puntos que se analizando mucho en estas reuniones comentó Quintero.

El profesional destacó la muy buena participación de Uruguay y Brasil con muchos balances y luego Colombia. En tanto la UNER estuvo presente con dos trabajos, una línea que investiga la línea de arsénico y otra línea de fertilización que es dinámica y liberación de nitrógeno para hacer mejor recomendaciones de fertilización.

Sobre el tema del arsénico en el cultivo explicó:

“Es uno de los temas más importantes que se están analizando. En nuestra región está afectando a la parte comercial, se han establecido límites a partir de 2014 y esos límites no hay que sobrepasarlos, entonces cada vez hay más capacidad técnica para determinar el arsénico que hay en el arroz y es cada vez más exigente el tema”.

“El arsénico está en todas partes en el agua, el aire, el suelo pero no hay que alarmarse, el problema es si se consume en grandes cantidades. Nosotros nos enfocamos en dar a conocer de dónde viene el arsénico y ahora estamos enfocamos en cómo manejar el cultivo para reducir el arsénico en el grano”.

“En esta oportunidad presentamos las técnicas de manejo para reducir el arsénico en el grano, básicamente se trata de interrumpir el riego en algún periodo vegetativo para bajar a la mitad o menos el nivel de arsénico en los granos. Por lado estamos viendo las variedad, hay algunas que tienen más tendencia a llevar arsénico al grano”.

“Esto es bastante nuevo a nivel mundial, es algo reciente, además hay mucho temor a asumir que en algunos sectores hay arsénico en el grano. Nosotros sabemos que tenemos un poco de arsénico pero es inocuo, pasa por el tracto digestivo y se elimina, el problema es cuando la concentración de arsénico es inorgánica que es dañina en el organismo”.

¿Cómo ven afuera el sistema de producción de arroz de Argentina?

“Lo ven como algo tremendamente extensivo. El cultivo de arroz en el resto del mundo se hace en pequeñas superficies, en Perú mismo que tienen muy buena calidad de arroz son productores de pequeñas escalas y plantaciones hechas a mano. Por eso, muchos están queriendo pasar a un planteo de siembra directa como el que se hace en nuestro país por el hecho de reducir el agua, el gasto de energía y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero. Es una tendencia que se viene marcando fuertemente”.

¿Y qué traería de otros países?

“El lema del encuentro “Alianzas para la sostenibilidad de la producción arrocera”, me llamó mucho la atención en cuanto a la integración, me parece importante rescatar las alianzas institucionales donde las posibilidades de encontrarle las soluciones a los problemas se buscan en una red Latinoamericana que también tiene vinculación con otros países”.

“Fue muy interesante el trabajo que presento un investigador de Japón que habla de que la nueva revolución verde del arroz pasa por cambiar la estructura de las raíces, es decir, con raíces más profundas que puedan traer más nutrientes y usar menos agua”.

¿Cómo se sigue con la difusión de los trabajos?

“En eso nosotros estamos muy bien porque en Entre Ríos tenemos la fundación PROARROZ que siempre apoya con financiamiento y a ahí se transfieren todos estos avances”.

Por último, ¿Cómo ve la actual campaña arrocera?

“Fue bastante complicada al inicio por las lluvias que no dejaba sembrar pero por suerte el clima luego acompañó bien. Para el que no tuvo problemas de riego alcanzó producciones muy buenas de alta calidad. Los valores internacionales también ayudaron aunque con el arroz siempre cuesta llevar el precio internacional al precio interno” concluyó. (Fuente: Campo en Acción)

01 de Junio (Valor Local)