EL AJUSTE MONETARIO Y  EL DESAFÍO EN LA PRÓXIMA LICITACIÓN DE LETRAS DEL TESORO

En medio de un contexto global que sigue sin ayudar, el plan financiero del Gobierno enfrenta un nuevo gran desafío.

El derrumbe de Wall Street, la suba del bono del Tesoro norteamericano y el desplome del petróleo, provocaron una revaluación mundial del dólar porque el mundo eligió la seguridad antes que el riesgo.

La situación complicó de una manera crucial al plan financiero argentino que se juega a todo o nada el miércoles en la licitación de Letras del Tesoro capitalizables en pesos que vencen el 22 de febrero de 2019 y pagan una tasa mensual de 4% y Letras ajustables por el costo de vida a, también, un plazo de 91 días.

Con estos dos instrumentos deberán absorber una gran parte de los $122 mil millones que quedaron en libertad tras la licitación de Lebac donde el mercado fue reacio a aceptar una tasa de 50% anual y renovó solo $40 mil millones. El dinero libre dirá presente en la plaza y la clave es la decisión que tomarán los tenedores de esos pesos: ¿Comprarán Letes, irán a plazo fijo o se volcarán a la compra de dólares?

Si optan por la última opción, el Banco Central tendrá un problema para bajar las tasas de interés, aunque haya proclamado su decisión de llevarlas por debajo de 60% anual en la licitación de Leliq.

Pero el punto vulnerable de toda la política monetaria son los bonos de la deuda que volvieron a bajar arrastrado por la crisis norteamericana. La Argentina tuvo bonos que se desplomaron, en particular los que vencen después de 2019 que llegaron a perder más de 3% de su valor y elevaron el riesgo país a 674 puntos básicos (+0,15%). El 8 de noviembre el riesgo país estaba en 597 puntos.

"La suba del riesgo país acorrala al Banco Central y enciende luces de alerta. Es una variable que no puede controlar con el plan monetario y que le complica la baja de las tasas de interés", señaló Federico Sidi de Compass Group. "Sin embargo hay empresarios que van a seguir apostando al peso porque con dos meses de tasas al cuatro por ciento mensual pagan parte del aguinaldo y el bono de cinco mil pesos. Esto es lo que indica la lógica d la economía. Pero habrá que ver como juega la psicología en un país con riesgo creciente y paralizado", agregó.

Cuando un país se encamina a los 700 puntos de riesgo y el andar del mundo le demuestra que es difícil que revierta la tendencia, las casas matrices comienzan a pedirle a sus sucursales que les giren dólares en forma de utilidades. De la misma manera, hay quienes aconsejan reducir la exposición en pesos.

No son pocos los que ven a un dólar encaminarse hacia la banda superior que en este momento está en $ 46,17. Es decir que puede subir de manera gradual sin que el Banco Central deba intervenir.

El fatídico martes acorraló al Banco Central y todo el éxito del plan monetario ahora está en mano de las empresas, inversores institucionales y ahorristas

Por de pronto, en bancos y casas de cambio la divisa aumentó 0,50% a $37,17. El dólar mayorista subió 25 centavos a $ 36,20. Está 10 pesos por debajo de la banda permitida por el FMI. El dólar mayorista había crecido 40 centavos en la rueda, pero los ingresos de divisas de las exportaciones acumuladas por el feriado, hicieron que recorte su ganancia. Pero no hay que olvidar que el dólar está atrasado y puede traer consecuencia en esta crisis que hace que se devalúen el peso mejicano, el chileno y el real, entre otras monedas.

Los bonos en dólares que vencen más allá de 2019, al igual que el plazo fijo, subieron su renta. Su tasa de retorno supera 11% pero no atrae, sino que asusta porque es el espejo en el que se ve la Argentina. Cualquiera sabe que una nación con 700 puntos de riesgo tiene una economía con serios problemas y que es un riesgo prestarle.

Estados Unidos también tiene su forma de medir el riesgo interno y lo hace con el VIX, un indicador que va de la mano del S&P 500, uno de los índices de Wall Street que ayer bajó 1,82%. El VIX, conocido como "el índice del miedo", aumentó 2,38% a 22,48 puntos. "Cuando está por encima de los veinte puntos, los inversores se calzan las zapatillas y cuando pasa los treinta, corren", asegura el mercado.

No se salvó ni el Bitcoin que perdió casi 10% -el día anterior había bajado 13%- y está en USD 4.356

Todo indica que en Estados Unidos el techo del crecimiento está cerca y la Reserva Federal sigue sin abrir la boca. Se espera una desaceleración de la economía mundial y el mejor indicador es el petróleo que en los mercados de futuros descuenta que va a tener menor demanda y por eso bajó casi 6%. Cuando el comercio internacional merma, hay menos fletes y menos consumos de derivados del crudo.

En este vuelo a la calidad, no se salvó ni el Bitcoin que perdió casi 10% -el día anterior había bajado 13%- y está en USD 4.356. La criptomoneda en su auge había llegado a cotizar a USD 20 mil.

Entre los bonos la caída más destacada fue la del Bonar 2024, el título más representativo, que perdió 1,14% a pesar de la suba del dólar. El bono rinde nada menos que 11,31% y es un bono de mediano plazo. El Bonar 2019, que vence en octubre próximo, cedió apenas 0,20% y rinde 4,24% porque el mercado sabe que está cubierto por los dólares del FMI. Lo curioso es que tiene un cupón de 6,25%. En otras palabras, su tasa de retorno es menor a la del cupón porque cotiza sobre la paridad. En cambio, el Bonar 2024 tiene un cupón anual de 8,75%.

La Bolsa, resumió el humor del mercado. El índice Merval bajo 4,48% con negocios por $ 486 millones. Las compañías de electricidad y los bancos fueron los más castigados. Central Puerto (-7,34%), Pampa Energía (6,57%), Banco Macro (-6,47% y BYMA (-5,75%) encabezaron el derrumbe. Las petroleras también sucumbieron. YPF se desplomó 5,95% y Petrobras, 5,45%.

Los ADR's argentinos -certificados de tenencia de acciones que cotizan en dólares- se desplomaron en Wall Street. El único papel que subió fue Despegar (+0,74%) que el día anterior había tenido una fuerte caída. Corporación América con 7,19% lideró la baja, seguido por Mercado Libre con 6,44% y Banco Macro con 5,94%.

El fatídico martes acorraló al Banco Central y todo el éxito del plan monetario ahora está en mano de las empresas, inversores institucionales y ahorristas. Ellos deciden si desde ahora renuevan los plazos fijos y siguen en pesos, o comienzan a dolarizar sus carteras. (Fuente: Infobae)

Fuente: (valorlocal.com.ar)