Por rubros, el mayor crecimiento de enero se dio en Minerales no metálicos, que con un 22,2% marcó su quinto incremento interanual consecutivo.
El sector Automotor continuó a su vez la expansión registrada durante los últimos meses de 2020, tanto en el mercado interno como en el externo, con un crecimiento de 17,5% en el mes.
En el caso de Metálicas básicas (11,2%) la recuperación continuó por la mayor producción de acero (24,3%) dado que la producción de aluminio continuó en niveles muy reducidos (-21,2%).
El sector de Alimentos y bebidas (0,4%) se mantuvo relativamente estable con respecto del mismo mes del año anterior.
En el rubro fabril «se observó una heterogénea recuperación: por un lado, la molienda de oleaginosas, los lácteos y las bebidas impulsaron el crecimiento del sector, mientras que por el otro la carne vacuna, la carne aviar y el vino traccionaron el indicador a la baja», detalló el informe de la UIA.
«El sector continúa afectado por la vigencia de precios máximos y crecientes controles a la actividad», señaló al respecto.
La otra cara de la moneda
Por el contrario, del documento se desprenden que existen sectores que continuaron a la baja durante el primer mes del año.
En el caso de la industria del Papel y cartón (-7,8%) la contracción corresponde a paradas de planta, y en la Refinación del petróleo (-7,2%) la producción continuó en niveles muy reducidos, explicaron.
Finalmente, en las Sustancias y productos químicos, la producción de enero se contrajo 3,3%, también en el marco de paradas y mantenimiento de plantas.
Durante enero, el 55% de los 58 subrubros analizados presentaron incrementos con respecto al mismo mes de 2020, mientras que el 45% restante operó a la baja.
De acuerdo con el informe, la utilización de la capacidad instalada de la industria mostró por segunda vez una caída mensual y se ubicó en 57,2% en enero, con una contracción mensual de 1,2 puntos respecto de diciembre.
Los sectores por encima del promedio fueron Alimentos y bebidas, Papel y cartón, Refinación de petróleo, Sustancias y productos químicos, Industrias metálicas básicas y Minerales no metálicos.
En cambio, Productos del tabaco, Productos de caucho y plástico, Edición e impresión, Metalmecánica, Productos textiles e Industria automotriz se encontraron en niveles más reducidos de uso de la capacidad instalada. (Fuente: Télam)