Mercados: La Bolsa subió más de 7% y los bonos ganaron 4% con impulso de la negociación con el FMI

Las acciones y los bonos argentinos registraron una contundente mejora de precios en la primera sesión de diciembre, ante la novedad de una reunión entre enviados del Gobierno y el staff del FMI el próximo fin de semana. El panel S&P Merval de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires ganó un 7,4%, a 85.164 puntos, después de haber retrocedido un 5% el mes de noviembre.

El panel de acciones líderes de la Bolsa porteña conserva una ganancia en pesos de 66% en 2021.

A las 17 horas, al cerrar las operaciones en la Bolsa porteña, las acciones y ADR de compañías argentinas que son negociados en dólares en Wall Street trepaban hasta 12,5%, encabezados por los títulos de IRSA, seguidos por Pampa Energía (+10,9%) e IRSA Propiedades Comerciales (+10,9%).

Mientras que el riesgo país caía importantes 88 unidades en el día, a 1.825 puntos básicos, los bonos Globales ganaron un 4% en promedio este miércoles, tras haber resignado un 8,5% el mes pasado. En 2021 las pérdidas alcanzan el 18% para estos títulos públicos, que son la referencia de la deuda argentina en el exterior.

El mercado recibió de manera positiva una esperada noticia: una delegación argentina partirá este sábado hacia Washington para continuar las reuniones técnicas con el staff del Fondo Monetario Internacional (FMI) en la carrera contra reloj para intentar evitar un default a fines del primer trimestre de 2020 y refinanciar pagos que rondan los USD 19.000 millones durante todo el año próximo.

Además, la ganancia de los títulos argentinos fue más destacada si se toma en cuenta que los mercados globales reaccionaron en baja por segunda jornada consecutiva, tras las declaraciones del presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos, Jerome Powell, quien reconoció que la palabra “transitoria” ya no es el término más exacto para describir la naturaleza de la elevada tasa de inflación en la economía, la más alta en más de tres décadas.

“Probablemente sea un buen momento para retirar esa palabra”, dijo Powell, en respuesta a una pregunta sobre el uso persistente de la referencia para explicar por cuánto tiempo se espera que persista la acelerada inflación, en un testimonio ante la Comisión de Banca del Senado.

Powell advirtió que la variante Ómicron del COVID-19 entraña nuevos riesgos para las perspectivas económicas del país norteamericano, para el mercado de trabajo y para la senda de inflación durante los próximos meses.

Powell alertó que la nueva variante del coronavirus eleva la incertidumbre sobre la inflación en EEUU

”El reciente incremento en los casos de COVID-19 y el surgimiento de la variante Ómicron plantea riesgos a la baja para el empleo y la actividad económica y eleva la incertidumbre por la inflación”, subrayó Powell en el discurso inicial que pronunció durante su comparecencia ante la Comisión de Banca, Vivienda y Asuntos Urbanos del Congreso.

El banquero central alertó acerca de las mayores preocupaciones que por el virus podrían reducir la predisposición de los ciudadanos a trabajar en persona, lo que ralentizaría la recuperación del mercado laboral e “intensificaría” los problemas todavía persistentes de la cadena de suministros.

El presidente de la Fed, Jerome Powell      Cabe recordar que la tasa interanual de inflación en Estados Unidos se disparó en octubre hasta el 6,2% -ocho décimas por encima de la de septiembre- lo que supone el registro más alto de los precios de consumo en este país desde 1990, informó este miércoles la Oficina de Estadísticas Laborales.

Los precios de consumo subieron 0,9% desde septiembre, según esta estadística, más del doble que en el balance del mes anterior. El salto estuvo impulsado principalmente por los aumentos en el combustible, alimentos y automóviles.

El presidente de la Fed reconoció que la inflación será duradera en EEUU

La inflación en los EEUU se está acelerando de nuevo a medida que se desvanece el lastre económico de la oleada veraniega de infecciones por COVID-19, impulsada por la variante Delta, y persisten los cuellos de botella en la oferta.

Los miles de millones de dólares de ayuda por la pandemia de los gobiernos de todo el mundo alimentaron la demanda de bienes, dejando las cadenas de suministro sobrecargadas. La pandemia, que ha durado casi dos años, trastocó los mercados laborales, provocando una escasez mundial de trabajadores necesarios para producir materias primas y trasladar los bienes desde las fábricas a los consumidores.

(Fuente: Infobae)