El turismo se consolida como uno de los motores de la economía santafesina

El turismo moviliza “en gran medida al sector económico”, sostuvo el secretario de Turismo provincial, Alejandro Grandinetti. El turismo extranjero en Santa Fe fue un 127% mayor que en 2019. El destino más elegido fue Rosario.

Por Marlene Vallejos

La provincia de Santa Fe va camino a una reconversión de su oferta turística y a posicionarse como uno de los destinos predilectos para disfrutar de la naturaleza y de las actividades al aire libre.

En medio de una nueva ola de calor, y con días de verano aún por delante, ya es posible conocer algunos datos a modo de balance de lo que la temporada estival dejó en la economía de la provincia.

En diálogo con Valor Local, Alejandro Grandinetti, secretario de Turismo de Santa Fe, reconoció que “el balance es muy bueno, es una temporada que sigue marcando una gran potencia en cuanto a movimiento de personas y de recursos económicos”.

El funcionario aclaró además que la temporada comenzó más tarde de lo habitual en todo el país por la final del mundial de fútbol, seguida de las fiestas de fin de año.

La realidad marca que hoy la actividad turística “motoriza en gran medida al sector económico”, sostuvo Grandinetti.

Datos

Es posible corroborar esta definición con los indicadores publicados por el Instituto Provincial de Estadísticas y Censos (IPEC) donde los datos de fines de 2022 dan cuenta de que el turismo es el sector que más creció respecto a 2021.

Representa un crecimiento interanual del 22% (incluyendo gastronomía, hotelería y otros servicios), cifra que supera a la de la construcción que en 2022 fue del 7% en la provincia. “Esto marca un gran impacto de recuperación económica sostenida”, expresó Grandinetti.

Los balances indican que, de a poco, se están recuperando los niveles de pre-pandemia e incluso superándolos en algunas cuestiones puntuales.

Por ejemplo, el turismo extranjero en la provincia de Santa Fe fue un 127% mayor que en 2019. En tanto que el destino más elegido por este sector fue Rosario.

Balance estival

Más allá del inicio tardío de la temporada de verano en Santa Fe, el balance es más que positivo en lo que hace a movimiento de personas y ocupación en gran parte de las ciudades y comunas.

“Fue un verano muy importante para nosotros”, sostuvo el responsable de la cartera de turismo lo cual deja entrever la relevancia que adquiere este sector en la economía provincial.

Respecto a enero, y de acuerdo a los relevamientos del Observatorio Argentino de Turismo (OAT), se registró un gran movimiento turístico en todo el país y Santa Fe no fue la excepción.

Detalles

Algunas localidades como Melincué alcanzaron el 100% de ocupación y Saladero Cabal un 90%. En tanto que otras como Villa Constitución y Luis Palacios marcaron un 85%; y Oliveros, Helvecia y Monje alcanzaron un 80% de ocupación durante el primer mes del año.

En lo que hace a las dos principales ciudades, Santa Fe y Rosario, la ocupación promedio en enero fue del 60% y del 52% respectivamente con picos mayores durante los fines de semana.

El carnaval en febrero marcó una bisagra respecto a la temporada, según los datos del OAT indican que, durante el fin de semana de cuatro días, Cayastá y Santa Rosa de Calchines alcanzaron el 100% de ocupación.

Mientras que San Javier, Saladero Cabal y Romang tuvieron un promedio de 95%. Villa Constitución tampoco se quedó atrás con un 90% de ocupación, seguida de Santa Fe con un 85%.

En relación al gasto promedio diario del turista que llegó a Santa Fe, Grandinetti especificó que fue de entre $5000 y $6000.

Destinos de naturaleza

Sin dudas que las localidades de la costa son las que mueven el termómetro de la temporada. Sobre todo después de la pandemia donde la tendencia de los visitantes es optar por destinos que garanticen espacios al aire libre y en contacto con la naturaleza.

Las estadísticas del verano indican que Santa Fe tuvo picos de ocupación plena en el corredor de la Ruta 1, desde Santa Fe hasta Reconquista, donde se destacan los complejos de naturaleza vinculados al Delta del Paraná.

Si bien el sector hotelero y cabañero está volviendo a los niveles de ocupación de la pre-pandemia, aún cuesta la recuperación al 100% de la actividad sobre todo por los altos índices de inflación que inciden en los costos fijos de mantenimiento.

En voz propia

Ayelen Muchiutti, administradora de un complejo de cabañas en la localidad de San Javier, contó a Valor Local que en su emprendimiento familiar el nivel de ocupación más alto se registró en enero con un 85% frente a un 55% en diciembre y a un 80% en febrero.

“En relación a la temporada anterior, la gente buscó precio, pidió descuentos, preguntó y comparó mucho antes de hacer una reserva”, explicó Muchiutti. “El promedio de estadía fue de tres días, aunque tuvimos visitantes que se quedaron solo dos días. Los fines de semana largos la estadía fue de cuatro días”, agregó.

La cabañera se refirió además a la inversión económica que significa sostener un emprendimiento de estas características en la actualidad. “Los costos de mantenimiento subieron, y en el caso de la costa estos costos fijos no se cubren tan fácilmente. Los gastos de mantenimiento, trabajadores e impuestos son relativamente similares, ya sea en la costa santafesina o en las sierras de Córdoba”, explicó.

En el caso particular de la ciudad de San Javier, este verano los precios en una cabaña para cuatro personas fueron desde los $12.000 a los $15.000 por día (dependiendo el tipo de complejo). Mientras que para seis personas, los precios rondaron entre los $18.000 y $21.000

Inversiones y proyecciones para el sector

Con la temporada de verano en su recta final, las expectativas están puestas en el Previaje 4, el programa de preventa turística que reintegra el 50% de los gastos de viaje en una tarjeta precargada.

El ministro de Turismo y Deporte de la Nación, Matías Lammens, anunció que «la idea es lanzar la cuarta edición de programa en marzo para viajar en mayo y junio».

Por su parte, Grandinetti afirmó que la nueva edición del programa va a ser muy importante para la provincia ya que el fuerte del turismo regional se da después en Semana Santa, cuando empiezan a tener mayor movimiento las dos grandes ciudades que motorizan la actividad: Rosario y Santa Fe.

El sector ve también con buenos ojos el cambio que se ha venido dando en la forma de ocupación hotelera en los principales centros urbanos de la provincia. Tradicionalmente eran ocupados de lunes a jueves pero actualmente se da en mayor medida de jueves a domingo.

“Esto significa que va cambiando la forma y las características del visitante. Se pasa de un visitante corporativo relacionado al movimiento empresarial, a un visitante más vinculado al disfrute del fin de semana y del turismo”, explicó el funcionario.

Expansión

Por otro lado, se suman a estas proyecciones las inversiones que están en marcha en el sector. Especialmente en el sur de la provincia (Rosario y zonas aledañas) donde hay 10 proyectos de hoteles en construcción que marcan un hito muy importante y que superan los u$s200 millones de inversión. Tres de estos proyectos responden a cadenas hoteleras internacionales que decidieron invertir en la provincia: Hilton y Howard Johnson de Estados Unidos y Mercure de Francia.

“Estas inversiones en el sector privado hablan de un desarrollo en la provincia importante y duradero ya que garantizan un crecimiento en los próximos años”, señaló Grandinetti.

Con las cifras sobre la mesa será cuestión de analizar la experiencia y evaluar el contexto para seguir potenciando al sector turístico tanto desde el sector público como privado.

(ValorLocal)