Carbono cero: Inversiones sustentables en los negocios agropecuarios

Producir conservando: la mirada de empresarios y productores para obtener ventajas de valor en sus sistemas. La posibilidad de obtener un precio adicional por lo generado en mercados internacionales a través de certificaciones de procesos.

 

Por Verónica Puig, especial para Valor Local


El productor entrerriano es altamente eficiente y en la mayoría de los casos, la carne por ejemplo, se genera en sistemas con pasto como base y en monte nativo o de renuevo. Esto es una excepcionalidad en el mundo y por eso este producto puede tener un valor diferencial en los mercados internacionales”, explicó Matías Tortorella, ingeniero agrónomo y presidente de GestionAR, un fondo de inversión que promueve la certificación de procesos amigables con el ambiente.

El principio de “carbono cero” se basa en que las plantas capturan carbono de la atmósfera y emanan oxígeno. Este sistema, que también realizan los vegetales, beneficia el medio ambiente en general. Además de combate y previene el cambio climático, entre otras consecuencias del mal manejo del hombre sobre la naturaleza.

Matías Tortorella. Pte. de GestionAR.

De esta manera, “la producción sobre pastizales, pasturas y montes se convierte en un sistema que además de ser amigable con el ambiente, es potencialmente un sistema que puede permitir a los productores exportar productos con certificación ‘carbono cero’ y conseguir un precio mayor. Por ejemplo, en las carnes”, detalló Tortorella.

En cuanto a la agricultura, la producción de cereales y sobre la generación de estos alimentos exportables con certificación internacional, Tortorella reconoció que los productores que en nuestro país «trabajan en un 80% en siembra directa. Están muy avanzados respecto a otros del mundo».

“Entre Ríos ha tenido desde hace años incentivos a la agricultura amigable con el ambiente, son líderes en sistematización de suelos y tienen regulaciones vigentes para evitar los desmontes. Esto los posiciona en un lugar destacado para poder ir un paso más allá y trabajar para lograr las certificaciones internacionales de ‘carbono cero’”, agregó el presidente de la compañía que se dedica a acompañar a los empresarios en el proceso de acceder a estos mercados y certificaciones.

El futuro verde

Los sistemas productivos de nuestro país se destacan por llevarse adelante en ambientes donde en la mayoría de los casos, se tiene una conciencia sobre la preservación de los recursos naturales, especialmente porque son en prevalencia empresas familiares con arraigo y tradición de trabajo rural.

“Que sean generaciones que van heredando no sólo la tierra sino todos los recursos, es una ventaja para los procesos de largo plazo y que tienen a la preservación de la naturaleza como garantía de futuro productivo. Eso permite que se mire al presente como la posibilidad de invertir en lo que vendrá y por lo que se puede obtener un precio diferencial”, explicó Tortorella.

Argentina obtuvo recientemente 82 millones de dólares, en concepto de retribución por haber logrado reducciones en la deforestación en la provincia de Chaco, en la selva de Tucumán y de Misiones. Los ingresos se obtuvieron por parte del Proyecto de Pagos Basados en Resultados de la Reducción de emisiones derivadas de la deforestación (REDD+), que forma parte de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático.

“Si un productor que hace ganadería tradicional en el campo de Entre Ríos, mayormente de cría y con una recría en confinamiento de pocos días, genera una carne ‘carbono cero’. Hay cadenas de restaurantes en Europa que demandan este producto y lo exhiben como de calidad premiun: pagan hasta 5 dólares más a los exportadores argentinos que la venden”, explicó Tortorella.

Tortorella sostuvo que la producción de carne en la provincia es una «excepcionalidad en el mundo y por eso este producto puede tener un valor diferencial en los mercados internacionales”.

Sistemas

Carbono cero contempla además otros sistemas como la generación de biogás por medio del tratamiento de la materia orgánica generada. Por ejemplo, en la porcicultura, sector de gran desarrollo en nuestra provincia.

También contemplan la generación de energía eléctrica en base a la biomasa, especialmente para los establecimientos que en Entre Ríos se dedican a la producción forestal.

“Los negocios agropecuarios con carbono cero favorecen el cumplimiento de las metas medioambientales a las cuales se ha comprometido Argentina en los distintos acuerdos internacionales. Entre ellas se destacan las metas de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero con miras al 2030, así como el objetivo de lograr un desarrollo neutral en carbono para el año 2050”, concluyó el ingeniero agrónomo Matías Tortorella.

(Fuente: ValorLocal)