El comercio santafesino quiere que sigan los incentivos al consumo en 2022

Corresponsalía Santa Fe

Luego de un 2020 muy duro por la pandemia el comercio santafesino empieza a ver signos de recuperación. El Centro Comercial de Santa Fe realizó un trabajo en el que se midió la cantidad de locales desocupados. La primera lectura se hizo en marzo del 2020, la segunda en octubre de ese año y la tercera en octubre de este año.

Respecto al impacto de la pandemia, el presidente del Centro Comercial de Santa Fe, Martín Salemi, dijo que entre marzo de 2020 y octubre de 2020 hubo un incremento del 25 por ciento de locales desocupados en la ciudad y que en total sumaban 350.

«Hubo muchos que se reubicaron y otros que cerraron. En esos casos la mayoría se traslada a la informalidad con el sistema de showroom y eso es un problema porque te crea una competencia desleal con aquél que tiene su local abierto. La última medición que hicimos de nos da un amesetamiento del incremento de los locales desocupados. Creemos que a medida que la actividad se empiece a recuperar eso se revierte», puntualizó.

Además, el dirigente aseguró que los últimos indicadores del Día de la Madre dieron un crecimiento de las ventas, pero aclaró que eso es impulsado por el uso de las tarjetas y Billetera Santa Fe. «Eso nos dio un fuerte impulso con el descuento y todos los comercios lo utilizan. También se sumaron Banco Nación y Banco de Santa Fe con descuentos fuertes y creo que eso va a ser el eje para poder cerrar buenas ventas en Navidad», añadió.

Para Salemi también favoreció la apertura del resto de las actividades que quedaban cerradas desde la pandemia como los rubros de entretenimiento, eventos, salones y peloteros. En ese sentido afirmó: «Todo eso va a derramar a la economía del comercio. Son positivas las expectativas, aunque tenemos cautela porque todavía estamos en pandemia y esperemos que la variante Delta no nos golpee. Por eso creemos que nos encaminamos a un cierre de año mucho mejor de lo que fue el año pasado».

Por su parte, el prosecretario de la entidad, Jorge Baremberg, aclaró que aún el comercio santafesino no alcanzó los niveles prepandemia y remarcó que los años 2018 y 2019 fueron muy malos en ventas. «Si estamos en el umbral de la prepandemia significa que tampoco estamos bien. Luego de lo que fue el 2020 con los locales cerrados por dos meses y medio y todo lo que pasamos hoy es la panacea. Pero eso todavía no es lo mismo que 2019 donde el amesetamiento ya era muy grande», sostuvo.

Acerca de las expectativas para las fiestas de fin de año, Baremberg consideró que hay rubros que están con expectativas altas de ventas. «Hay varios negocios que la semana que viene empiezan a preparar las vidrieras con motivos navideños. Hay que tener en cuenta que el árbol se arma el 8 de diciembre. La mesa del 24 de diciembre nos permite activar rubros como el bazar, la indumentaria y calzado. Hay muchos rubros que se movilizan y el broche final es el juguete. Pero hay otros que son un interrogante, como el de la tecnología que producto del dólar no sabemos qué va a pasar».

El empleo y las cargas impositivas

Entre los principales problemas que enfrentan los comerciantes, Baremberg apuntó la falta de rentabilidad. «Nos deja exhaustos la gran presión tributaria que hay. Después está lo que denominamos ‘el costo laboral’, que no es el sueldo del empleado. Hoy medido en dólares es un salario totalmente achicado. Pero el tema es el porcentaje que le pagamos al Estado y a los sindicatos para poder sostener el empleo formal. El empleado gana muy poco, pero es mucho lo que tenemos que poner en impuestos, 931, sindicatos y obra social. Eso es muy oneroso. La Argentina tiene impuestos sobre impuestos y eso nos afecta la rentabilidad», cuestionó.

Salemi coincidió y dijo que «en cuanto al empleo hoy el comerciante que necesita tomar un empleado lo piensa dos veces» por el costo impositivo y laboral que tiene. En ese sentido señaló que «a veces trabaja más el dueño o hay empleados que trabajan horas extra».

«Es una cuenta pendiente en la Argentina una reforma laboral porque tomar un empleado hoy es un problema, no por el empleado en sí, sino porque es un costo importantísimo para el comerciante. Tenemos entre un 35 y un 40 por ciento más de costo laboral», aseguró.

«Después de casi dos años de pandemia, el comerciante necesita una estabilidad, un horizonte de seguridad y todos estos nubarrones que vemos a nivel nacional y despejar la inseguridad jurídica que hay. Hay que tener una expectativa de hacia a dónde va el país porque todo eso cae en la microeconomía que es la del comercio local. Hay que intentar que el año que viene los incentivos al consumo sigan porque es el abecé de la venta de los comerciantes», concluyó.

(Valor Local)