El Senado brasileño vota «Sí» avala la privatización de la gigante Eletrobras

El Senado brasileño inició este jueves una sesión clave para determinar la privatización de la mayor empresa eléctrica de America Latina, Eletrobras, cuya transferencia de acciones al sector privado es uno de los principales proyectos del gobierno del presidente Jair Bolsonaro y su superministro de Economía, Paulo Guedes.

El presidente del Senado, Rodrigo Pacheco, convocó a la sesión para tratar el decreto provisorio de privatización del presidente Bolsonaro que vence el 22 de junio en caso de que no sea aprobado por el Senado.

La Cámara de Diputados ya aprobó fácilmente la propuesta, que apunta a la desestatización de Eletrobras mediante la venta de acciones y la acción de oro en manos del Estado.

Parte de la oposición de izquierda y derechistas liberales anunciaron que se opondrán al proyecto, que tiene como miembro informante al bolsonarista Marcos Rogerio, del partido oficialista Demócratas.

Uno de los puntos más polémicos de la privatización es el destino de los futuros trabajadores despedidos, la previsión de un aumento de la tarifa y la vía libre para instalar torres de transmisión de energía en reservas indígenas amazónicas.

El Senado brasileño vota si avala la privatización

Bolsonaro había dicho que habrá «caos energético» en el país si no se vende Eletrobras, cuya privatización es clave para Guedes, que no pudo privatizar empresas de gran porte, además de la venta por cambio de paquete accionario de la distribuidora de estaciones de servicios de Petrobras, BR Distribuidora.

La cuenca del Paraná está sufriendo la peor crisis hídrica en 91 años, lo cual aumentó las multas a los consumidores por la sequía de las centrales hidroeléctricas.

Casi el 80 por ciento de la generación de energía en Brasil es de matriz hidroléctrica.

Trabajadores no esenciales para el mantenimiento del servicio de la empresa fundada en 1962 están en huelga esta semana en repudio al decreto provisorio de Bolsonaro.

 

(Fuente: Télam)