Afirman que “es imposible que la provincia salga del estado de sequía”

 

Así lo argumentó el SIBER. «En el horizonte cercano, las lluvias pueden reaparecer hacia mediados de la semana próxima. Pero no hay expectativas de milimetrajes elevados», indica el reporte semanal.

En su reporte semanal, el Sistema de Información de la Bolsa de Cereales de Entre Ríos (SIBER) sentenció que las lluvias pronosticadas para los próximos días serán insuficientes para salir de la sequía en el territorio provincial.

Precipitación acumulada del 11 al 17 de enero

La última semana se presentó con algunas lluvias modestas y lloviznas sobre distinto sectores de la provincia, prevaleciendo los cielos cubiertos entre el miércoles 11 y el jueves 12, momento en el que se concretaron estos eventos pluviales.

Luego sobrevinieron jornadas con temperaturas muy elevadas, las cuales se sostuvieron sin mayores cambios hasta la jornada de ayer martes 17.

Entre el sábado y el martes, los registros térmicos estuvieron por encima de los valores normales. Esto dejó condiciones ambientales hostiles, favorecidas por la fuerte insolación y la presencia del sistema de alta presión.

Justamente las zonas de alta presión promueven los movimientos descendentes, calentando y secando el aire cercano a la superficie.

Este comportamiento tan poco favorable para el desarrollo de sistemas precipitantes no se manifestó de manera tan significativa sobre el oeste y esto se reflejó en un mejor comportamiento pluvial.

Se viene notando un diferencial positivo a favor del oeste. Si bien el mismo no es contundente, en general la frecuencia de lluvias en la provincia de Córdoba ha sido mejor.

La circulación de aire está favoreciendo el acopio de humedad en zonas del oeste. Para mañana se espera el avance de una onda frontal y justamente son zonas del sudoeste de la región pampeana, centro sur de Córdoba y posiblemente el oeste de la zona núcleo las que estén mejor preparadas para traducir la inestabilidad de cierta perturbación en lluvias con milimetrajes de alguna significancia.

Al arribar a la provincia, la línea de inestabilidad promoverá el desarrollo de nubosidad y posiblemente estas coberturas sean acompañadas por precipitaciones. Pero no hay expectativas de milimetrajes elevados.

En el horizonte cercano, las lluvias pueden reaparecer hacia mediados de la semana próxima. Sin embargo, no serán sistemas que puedan corregir las falencias pluviales que se vienen arrastrando.

Estado de las reservas al 18 de enero de 2023

Con el panorama de lluvias que se acaba de describir, es imposible que la provincia salga del estado de sequía.

Obviamente puede haber matices de escala menor o zonas con acceso a riego que puedan ostentar una mejor condición de humedad pero las producciones trabajadas en secano siguen hostigadas por la seca.

El análisis es bastante corto en este sentido. Mientras no se prevea un cambio significativo en el patrón pluvial, los cultivos de verano no encontrarán una respuesta adecuada como para recuperar un estado razonable en su desarrollo fisiológico. Al menos un estado que permita llevar los lotes a cosecha.

Desde el punto de vista meteorológico la mirada que se puede hacer viene muy atada al cambio de posición que está ocurriendo respecto del fenómeno La Niña.

Este indicador ha venido jugando desfavorablemente en forma continua pero ha tenido algunos momentos de menor influencia. En general estas temporadas no se relacionaron directamente con su ausencia o debilitamiento, sino con una mejor performance de la escala regional.

Un ejemplo sencillo de entender

La campaña fina en la provincia no ha tenido malos resultados teniendo en cuenta el contexto La Niña.

En los momentos claves de la definición del trigo, hubo ventanas húmedas favorecidas por la circulación de escala regional. Algo que no se vio en el resto de la zona núcleo.

Entrando a la gruesa, la provincia se acopló a las deficiencias que ya venían golpeando al resto de la franja central. La escala regional no tuvo más respuestas para dar y las ventanas húmedas desaparecieron.

Como se destacó, en diciembre y lo que va de enero, ha llovido mejor en el oeste. De nuevo el contexto La Niña apenas cambió. Pero la circulación desplazó las masas de aire con mayor contenido de humedad hacia el oeste y como resultado aparece ese diferencial positivo a favor de Córdoba, La Plata y oeste de Buenos Aires.

Aparecen tímidamente las condiciones para un cambio pero el mismo posiblemente no será con la premura necesaria.

(Fuente: BolsaCer)