La construcción en Rosario resiste a los efectos de la crisis económica
A pesar de los niveles inflacionarios y la devaluación de la moneda, la construcción en Rosario no baja sus índices. “Las obras no se paralizan por cuestiones económicos. Al contrario, recibimos consultas de personas que ya tienen construcciones y buscan realizar ampliaciones”, detallaron desde el municipio.
Por Marlene Vallejos
Afectado por el proceso inflacionario que atraviesa el país, el sector de la construcción en Rosario muestra signos de retroceso. No obstante, la actividad no se detiene y siguen sumándose proyectos nuevos de tipo residencial y no residencial.
En diálogo con Valor Local, Agustina González Cid, secretaria de Planeamiento de la Municipalidad de Rosario, brindó un panorama preciso de la realidad del sector en la ciudad del sudeste santafesino.
Efectos de la crisis económica en la construcción
El aumento de precios, sumado a la pérdida del valor adquisitivo en la economía argentina, afecta sensiblemente a todos los sectores económicos. La construcción no queda exenta de esta realidad y así lo demuestran algunos indicadores.
Respecto a la ciudad de Rosario, el tercer distrito más poblado del país luego de Buenos Aires y Córdoba, el mes de marzo registró una disminución en la cantidad de permisos otorgados de obras particulares.
En el tercer mes del año fueron 100 los permisos otorgados, la cifra más baja en los últimos dos años. En términos porcentuales, comparado con los valores de los años 2021 y 2022, fue de un 10% y 15% menos, respectivamente.
Si se toma el trimestre completo, durante enero, febrero y marzo de 2023 el total de permisos de edificación fue de 341, un 0,9% menos que el mismo periodo del año anterior.
En relación al total de superficies autorizadas, enero de este año marcó un incremento con respecto al mismo mes de 2022. Así, en Rosario se autorizaron 49.546m² de construcción, frente a los 25.729m² de enero del año anterior.
No obstante, a partir de febrero esta situación se revirtió marcando una disminución.
En el segundo mes de 2022 la cifra fue de 40.389m², mientras que en el mismo mes del año pasado el total fue de 57.945m². Marzo también registró una disminución con 35.444m² autorizados, frente a los 43.571m² de 2022.
Contraste
Al comparar los datos del mes de marzo de 2023 con los históricos del mismo mes, se observa que la construcción está por debajo de dichos valores con un 45,2% menos de permisos y un 33,4% menos de superficie autorizada.
Al respecto, González Cid explicó que “la baja de los últimos meses es mínima y se debe a la situación macroeconómica del país que se siente en todos los sectores”.
No obstante, la funcionaria afirmó que “aun así la construcción sigue pujando y recibimos muchas consultas de nuevos proyectos que demuestran que la gente sigue invirtiendo y desarrollándose en la ciudad”.
Valores de los materiales de la construcción en Rosario
Según datos de la Dirección General de Estadística de la municipalidad de Rosario, el consumo de cemento volvió a retroceder en febrero de este año.
Luego de la caída de más del 9% que tuvo lugar en diciembre de 2022 y del alza del 9,2% de enero, en febrero experimentó una baja interanual del 4,5%.
“Así, el consumo de febrero (895.938 toneladas) resultó menor no sólo al del año pasado, sino también al de los años 2018 y 2019, y apenas superior al de 2015”, señalaron desde el organismo.
Impacto inflacionario
La misma fuente indicó que, en promedio, los índices de precios de materiales de la construcción en Rosario han tenido en febrero de este año un incremento de alrededor del 5% con respecto a enero.
Al poner la lupa sobre los materiales más utilizados en el sector, se puede ver que el rubro ‘caños de PVC’ es el que registró el aumento mensual más alto (7,3%).
En la vereda de enfrente, el rubro ‘hierro redondo y acero para construcción’ es el que menos aumento registró con respecto a enero (2,0%).
Los mayores incrementos anuales (respecto a febrero de 2022) se dan en los rubros ‘hierro fundido’ y ‘conductores de cobre’, con variaciones que duplican las de otros rubros (225,5% y 218,8%, respectivamente).
Si se sitúa en este primer trimestre del año, se puede observar que las pinturas para construcción es el rubro que mayor incremento acumula (18,7%).
En el extremo opuesto, los ‘ladrillos comunes’ sólo aumentaron un 3,6% desde diciembre de 2022 y es el rubro que menos aumentó en el periodo de un año (34,9%).
Las variaciones en los precios y la falta de previsibilidad hacen que la actividad registre altas y bajas. Sin embargo, González Cid expresó que “la construcción sigue siendo un motor importante de la ciudad. Incluso se desarrollan proyectos grandes que nos dan la pauta de que la actividad viene bien”.
“Las obras no se paralizan por cuestiones económicas. Al contrario, recibimos consultas de personas que ya tienen construcciones y buscan realizar ampliaciones. No se está viendo una baja en las obras en construcción”, agregó.
Perfil de la construcción en Rosario
La secretaria de Planeamiento indicó que, en cuanto al tipo de construcción, la mayoría en la ciudad de Rosario es de tipo residencial. Así, en los primeros tres meses del año, fueron autorizados 88.803m² residenciales y 36.576m² de tipo no residencial.
“Hemos trabajado en normativas locales que brindan incentivos especiales para lotes grandes, en este momento tenemos varios regímenes diferenciales de este tipo que están pidiendo permiso”, explicó.
Nuevas edificaciones
González Cid hizo saber también que, en el último tiempo, en Rosario están aumentando las construcciones de usos mixtos. Se trata de dos o tres usos distintos que se dan en el mismo terreno. “Ya no es solo vivienda, sino que en la planta baja se proyectan además locales comerciales u oficinas”, explicó.
“Esto es a lo que apunta la ciudad de cercanía, a tener mayor variedad de uso en un entorno cercano y para eso hicimos ordenanzas que modifican las plantas bajas para que puedan tener más usos y mejorar así la ciudad”, agregó.
Consultada acerca de los distritos de la ciudad donde mayor cantidad de obras particulares se autorizan, la funcionaria afirmó que el centro es la zona donde hay más permisos. “Es algo que cambia dependiendo de la época, en noroeste también tiene muchos permisos actualmente”, añadió.
Rosario a futuro
González Cid afirmó que a futuro se perfila “una ciudad más próxima y más activa”. Para el gobierno local de Rosario es importante tener los espacios públicos con gente y con actividades.
“Cuando nos referimos a espacios públicos, no estamos hablando sólo de plazas y parques sino también de las veredas y las calles que son los espacios públicos por excelencia”, dijo.
“Buscamos tener más ojos en la calle. Para eso necesitamos tener plantas bajas más activas con usos variados y que todas las zonas de la ciudad estén activas durante la mayor cantidad de horas posibles”, explicó la funcionaria.
Activación
El esfuerzo se centra en evitar los centros mono funcionales, aquellas áreas que concentran un solo tipo de actividad como por ejemplo la financiera o comercial.
La secretaria explicó que, durante la pandemia, muchas ciudades del mundo en las que se daba este fenómeno se vaciaron al detenerse la actividad. Esto es lo que quiere evitar Rosario en cuanto a su planificación, por eso apuntan a zonas activas que concentren diferentes rubros y que garanticen actividad constante.
“Estamos dinamizando el centro, apuntamos a que más gente viva allí. Empiezan a aparecer proyectos importantes en este sector, algo que hace años no ocurría”, indicó.
Pese a los efectos de la recesión económica, la industria de la construcción en Rosario es una fuerza muy importante en el desarrollo urbano-edilicio y también en el movimiento económico de la ciudad.
Desde la venta de materiales y la mano de obra que se emplea, hasta el pago de la Tasa General de Inmuebles (TGI) cuando los metros cuadrados están construidos, en toda la cadena hay diferentes momentos de aporte que contribuyen al crecimiento socioeconómico.
(ValorLocal)
