Cae el consumo energético en la industria santafesina

La demanda de los grandes usuarios del sector cayó 21,2% interanual en marzo, según un informe del Centro de Estudios Scalabrini Ortiz.

El consumo eléctrico de las industrias y grandes comercios de Santa Fe cayó 21,2% interanual en marzo 2024 respecto a marzo del año pasado. Así lo informó la sede local del Centro de Estudios Scalabrini Ortiz (Ceso), que indicó que en el tercer mes del año se consumió una cantidad de Mwh inferior al promedio del primer semestre de pandemia.

En el mismo sentido, el consumo residencial bajó 12,8% en el mismo periodo. “Esto evidencia el fuerte impacto que tuvo el aumento en el precio mayorista de la energía eléctrica dispuesto por el gobierno nacional y la abrupta caída de la actividad económica”, señalaron desde el centro de estudios.

El último informe de la Federación Industrial de Santa Fe (Fisfe) había reportado que la demanda de energía eléctrica por parte de un grupo importante de grandes usuarios industriales con actividad en Santa Fe registró en febrero de 2024 una disminución de 0,7% interanual, pese al bajo nivel de comparación.

Desde la perspectiva sectorial, mientras que el complejo oleaginoso mostró un crecimiento de 46,1% interanual, la industria siderúrgica disminuyó su consumo de energía un 22,8% interanual mostrando bajas en sus cuatro grandes plantas.

Los datos sobre el derrumbe industrial se suceden en todo el país. El Índice de Producción Industrial (IPI) de la Fundación de Investigaciones Económicas Latinoamericanas (FIEL) registró en marzo una caída interanual de 13,7% y acumula un retroceso de 9,4% en el primer trimestre del año.

La fundación también reveló que los despachos de cemento acumulan un año en retroceso habiendo acelerado el ritmo de caída desde noviembre. Por su parte, hubo “un marcado retroceso en la producción primaria y de elaborados de la siderurgia”. En el caso de la producción automotriz, luego de liderar la actividad industrial durante los últimos tres años, sufrió un importante recorte de la producción, en las exportaciones y los patentamientos.

“Mientras persisten problemas de abastecimiento de insumos, el desafío que enfrentan las terminales es la caída de la demanda interna y de las exportaciones a destinos como Chile, Perú, Colombia y México”, explicaron desde Fiel. (Fuente: La Capital)