Los industriales criticaron el nuevo Consenso Fiscal por agregarle una mayor carga tributaria al sector productivo

Alberto Fernández y casi todos los gobernadores firmarán este lunes el Consenso Fiscal que faculta a las provincias a subir y crear nuevos impuestos. En ese contexto, la Unión Industrial Argentina (UIA) emitió hoy un comunicado en el que rechaza la iniciativa por considerar que “establece una mayor carga tributaria al sector productivo”.

El Consenso Fiscal 2021 —que se aplicará a partir del año próximo— le permitiría a las provincias crear nuevos impuestos, como por ejemplo, un “impuesto a la herencia” y también incrementar otros, como las alícuotas de ingresos brutos de algunas actividades. Sin embargo, en Casa de Gobierno aseguran que se trata de una “armonización tributaria”.

“El Consenso Fiscal para 2022, que el Poder Ejecutivo Nacional pondrá a consideración de los gobernadores hoy por la tarde, genera enorme preocupación en el sector industrial debido a que incrementa la presión tributaria en el sector productivo al eliminar la reducción progresiva de ingresos brutos establecida originalmente en el año 2017″, cuestionó la UIA.

En ese sentido, remarcó que “específicamente en el sector industrial, que debería quedar exento del impuesto en el año 2022 de acuerdo al acuerdo original firmado en 2017, mantiene un tope de alícuota de 1,5%”. Asimismo, recordó que varias provincias incrementaron incluso sus alícuotas en los últimos años, aprovechando que se encontraban por debajo del máximo permitido.

“Es importante destacar que ingresos brutos es uno de los impuestos más regresivos y distorsivos del sistema tributario argentino actual”, destacaron los industriales.

En tanto, afirmaron que al igual que el IVA, su carácter regresivo se debe a que no sólo perjudica la competitividad de las empresas sino que su costo es afrontado por todos los consumidores, “impactando en mayor medida en los sectores más vulnerables que destinan mayor parte de sus ingresos al consumo”.

De acuerdo a la UIA, su aplicación en cascada lo hace distorsivo, ya que se incorpora como un costo y por lo tanto es trasladado a precios. “Es decir, el impuesto a los ingresos brutos grava varias veces el mismo valor agregado -por la inexistencia del cómputo de crédito fiscal- y se toma como costo de producción presionando sobre los precios”, detalló la entidad.

El contenido e implicancias de este Consenso Fiscal 2022 va en el sentido contrario de las medidas que se necesitan para impulsar la reactivación económica y la inversión productiva (Funes de Rioja)

En otro orden, añadió que a todo esto se suma un costo administrativo muy elevado por ser el impuesto con mayor cantidad de regímenes de recaudación del país y con heterogeneidad de características en las distintas jurisdicciones. Según la UIA, la existencia de diversos regímenes de recaudación del impuesto sobre los ingresos brutos, además, “hace que la alícuota efectiva que enfrenta cada empresa sea mayor que la que grava su actividad, ocasionando saldos a favor de difícil recuperación, que pierden valor con el paso del tiempo producto de la inflación debido a que no se actualizan”.

De acuerdo a la entidad fabril, el impuesto a los ingresos brutos tiene un impacto especialmente negativo en las exportaciones argentinas, por el costo incremental que genera en la producción local. “En los sectores transables, como el industrial, la baja del impuesto a los ingresos brutos es muy relevante para la competencia con productos extranjeros, tanto al exportar como para competir frente a las importaciones en el mercado interno”, analizó.

Es importante destacar que ingresos brutos es uno de los impuestos más regresivos y distorsivos del sistema tributario argentino actual

Otro aspecto de preocupación del nuevo Consenso Fiscal -según la UIA.-es que consigna que las provincias procurarán establecer un impuesto sobre la herencia a lo largo del 2022. Esto también tiene un efecto adverso sobre el sector productivo, al afectar el traslado de acciones de sociedades, que impacta sobre todo en las pequeñas y medianas empresas familiares”, afirmó.

Para la UIA, este tipo de impuesto generaría doble imposición en el país con el impuesto sobre los bienes personales. “Los países del mundo que gravan la herencia de bienes no tienen un impuesto sobre los bienes personales, y viceversa. Es decir, se grava el patrimonio de forma anual o en el momento de transferirlo, pero no en ambos momentos, porque esto genera una doble imposición sobre la misma base imponible”, detalló la entidad en un comunicado.

En ese sentido, dijo que Argentina requiere generar más exportaciones, fomentar la inversión y la generación de empleo formal. Al respecto, el presidente de la UIA, Daniel Funes de Rioja, manifestó: “El contenido e implicancias de este Consenso Fiscal 2022 va en el sentido contrario de las medidas que se necesitan para impulsar la reactivación económica y la inversión productiva”.

Asimismo señaló que este acuerdo de la Nación y gobernadores de todo el espectro político debería ir en el sentido de evitar incrementos de la presión tributaria al sector transable, en lugar de promover un impuesto distorsivo que tiene numerosos impactos negativos ya conocidos para la economía.

(Fuente: Infobae)