La pobreza alcanzó al 33,5% de la población del Gran Rosario

La tasa de indigencia se duplicó y llegó al 6,2%. La situación social empeoró respecto del año pasado. Sin embargo, los índices son más bajos que a nivel nacional.

El 33,5% de la población era pobre y el 6,2% indigente en el Gran Rosario al término del primer semestre del año, según los datos difundidos por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec). Estas cifras revelan un aumento interanual de 2,3 y 2,6 puntos porcentuales, respectivamente.

En números absolutos, 450.765 personas no cubrieron con sus ingresos los costos de una canasta mínima de bienes y servicios. Un universo dentro del cual 83.456 no alcanzaron a costear los alimentos básicos.

En este contexto derivado de la escalada inflacionaria, el aglomerado rosarino muestra un índice de pobreza menor en 6,6 puntos al del total de ciudades que mide el Indec. A nivel nacional, la pobreza subió 3,6 puntos hasta alcanzar al 40,1% de la población.

De hecho, el Gran Rosario es el sexto conglomerado con menor índice de pobreza del país, detrás de Caba (17,3), Ushuaia (25,4%), Comodoro Rivadavia (28%), Formosa (29,7%) y Mar del Plata (31,5%). En la tabla de indigencia se ubica séptimo, detrás de Comodoro Rivadavia (2,8%), San Juan (2,9%), Ushuaia (3,1%), Caba (5,4%), Río Gallegos (5,9%) y Viedma (6,1%).

Desde el segundo semestre de 2020, los índices de pobreza e indigencia de Rosario evolucionan por debajo del total de aglomerados que mide el Indec. Presumiblemente, la mayor fortaleza del mercado de trabajo en la región, aun con sus vaivenes, compense en parte las consecuencias de la fuerte suba de los precios.

  • EXPLOSIÓN DE INDIGENCIA

Así y todo, en el término de un año, 33.784 personas se sumaron a la pobreza en el Gran Rosario pero la indigencia creció por encima 35.009. Casi se podría decir que esta condición caracteriza a la totalidad de los nuevos pobres, además de alcanzar a mayor cantidad de población que ya estaba en esa condición.

La tasa de indigencia se duplicó en la región, reflejando el impacto que tuvo la suba del precio de los alimentos sobre la población pobre.

En la comparación interanual, es importante tener en cuenta que se realiza con un semestre, el primero de 2022, que había mostrado una fuerte reducción de la pobreza y la indigencia, de la mano de la recuperación pospandemia. El porcentaje de pobres rosarinos había sido de 31,2% en ese entonces, 8,2 puntos menos que en 2021.

Respecto del final del año pasado, la pobreza aumentó 0,3 punto y la indigencia bajó 0,1 punto. En cifras absolutas, la cantidad de pobres aumentó en 6.087 mientras que la de indigentes bajó en 1.555.

Se puede decir que la situación social en los primeros seis meses del año se mantuvo estable respecto de 2022, cuando ya había mostrado un deterioro. En cambio, en doce meses hay más pobres y el doble de indigentes, como consecuencia de una inflación anualizada de 115,6%.

En la primera mitad de 2023 la tasa de pobreza alcanzó al 24,4% de los hogares, 5,2 puntos menos que a nivel nacional, y la de indigencia al 5,4%, por debajo del total país en 1,4 punto. (Fuente: La Capital)