SANCOR CONCENTRA EN CÓRDOBA SU MAYOR OFERTA DE QUESOS

El proceso de reconversión comercial, de logística y societaria que la empresa láctea Sancor puso en marcha a mediados de 2006 todavía sigue su curso.

Con la reciente venta de la marca de quesos Tholem a la francesa Savencia Fromage & Dairy, que producía en su planta santafesina de Gobernador Gálvez, la cooperativa concentra ahora en Córdoba la mayor parte de su producción quesera, para lo que destina la mayoría de la leche que recibe.

La estrategia comenzó a tomar forma a comienzos de septiembre, cuando incorporó a la planta ubicada en Devoto la línea de producción de sus quesos Mendicrim.

De esta manera, la empresa reúne en las tres usinas que aún conserva en la provincia el mayor caudal de elaboración de quesos.

Además de producir ahora la línea de quesos untables, en la planta situada en la localidad del departamento San Justo fabrica crema, manteca y leche en polvo.

Estructura productiva

Mendicrim es una de las marcas más reconocidas de Sancor en el mercado de quesos para consumo interno. Hasta el traslado de su producción a Córdoba, la línea se elaboraba en la planta en Arenaza (Buenos Aires), que fue cerrada por la cooperativa en agosto de este año en el marco de la reducción de su estructura.

En el establecimiento que tiene en Balnearia, Sancor seguirá con la producción de quesos semiduros, cuyo nivel de elaboración se potenció a partir del traslado a esas instalaciones de las líneas que se hacían hasta abril de 2017 en Coronel Moldes, mientras que en la planta de La Carlota se focalizará en los quesos duros.

Además, en Santa Fe conserva la elaboración de lácteos en tres lugares. En Sunchales, la de dulce de leche y leches larga vida (blanca y chocolatada), infantiles y en polvo. En San Guillermo, queso barra y mozzarella. Y en Gálvez, las líneas de quesos fundidos y de rallar.

Con un volumen diario de recepción de leche que ronda los 600 mil litros, que representan 15 por ciento de los 3,5 millones de litros que llegó a procesar antes de entrar en crisis, Sancor busca lograr eficiencia en su plan de negocios, que reparte entre el mercado interno y algo en la exportación.

VUELTA A EXPORTAR

Con la economía de Brasil en crecimiento, y que se refleja en una mayor demanda de lácteos, la empresa le ha dado impulso a su filial Sancor do Brasil, la distribuidora que tiene en ese país desde 1986.

“En su momento, Venezuela fue un destino importante para el comercio exterior de la empresa; hoy Brasil vuelve a tener protagonismo y la idea es ganar lugar con la distribuidora propia”, indicó una fuente de la empresa.

Desde que inició su proceso de reestructuración, la cooperativa láctea redujo su plantel de personal en un 63 por ciento: de 5.100 trabajadores que tenía en 2016 a alrededor de 1.900 en la actualidad.

Su plan de adecuación arrancó en junio de 2016, cuando vendió su línea de productos frescos (yogures, flanes y postres) a la empresa Vicentín.

Con posterioridad, transfirió las plantas de Coronel Moldes a una cooperativa en Huanchilla; la ubicada en Centeno (Santa Fe), a la empresa La Tarantela, y la radicada en General Charlone (Buenos Aires), a San Gotardo, una láctea de la región.

En septiembre de 2018 oficializó la cesión a Adecoagro de los establecimientos industriales de Morteros y de Chivilcoy (Buenos Aires) a cambio de 45 millones de dólares.

En enero de ese año había vendido en 33 millones de dólares a la danesa Arla Foods el 50 por ciento de la sociedad que tenía en la planta industrial en Porteña destinada a la elaboración de proteína de suero de quesos.

Con la excepción de la línea de frescos, y a pesar de la reducción en su estructura, la cooperativa ha logrado mantener la oferta de productos con su marca, que aún conserva un alto valor. (Fuente: La Voz del Interior)

Fuente: (valorlocal.com.ar)