Retenciones: primeros choques entre Santa Fe y Nación

El aumento de las retenciones a la exportación provocó el primer encontronazo del gobierno santafesino y las entidades empresarias de la provincia con la administración de Javier Milei. “No vamos a permitir que le sigan poniendo el pie en la cabeza a nuestros productores e industriales”, dijo el ministro de Desarrollo Productivo de Santa Fe, Gustavo Puccini. Y el presidente de la Bolsa de Comercio de Rosario, Miguel Simioni, dijo que el aumento de los derechos de exportación es “un golpe inesperado” a la cadena agroindustrial.

El gobernador Maximiliano Pullaro y su ministro se reunieron con autoridades de las Bolsas de Comercio de Rosario y de Santa Fe, Carsfe, Federación Agraria, Sociedad Rural Argentina, Coninagro y representantes industriales.

Puccini señaló que “Santa Fe aporta demasiado ya” y advirtió que no va a permitir que “le sigan poniendo el pie en la cabeza a nuestros productores ni a los industriales”. Contó que trabaja junto a los diferentes sectores en la elaboración de informes para que el gobernador presente en Buenos Aires.

“Vuelven a tocar al sistema productivo e industrial de Santa Fe; no lo esperábamos, a nosotros no se nos pasaría por la cabeza ajustar a la producción”, dijo.

Miguel Simioni, presidente de la Bolsa de Comercio de Rosario, alertó que “un eventual aumento de las retenciones al 15% plantea un golpe inesperado para la agroindustria del país y en particular la santafesina”.

“Es necesario comenzar a dar señales y certidumbre a largo plazo que conviertan a la Argentina en un proveedor mundial de alimentos confiable, lo que redundará en mayor actividad, divisas y empleo”, insistió.

Puccini, por su parte, señaló que “la suba de retenciones en las economías tradicionales genera perjuicio y pérdida de competitividad”.

“El objetivo que Santa Fe sea una provincia que exporte aún más, el posible aumento de retenciones va en contra”, dijo.

La decisión oficial

Ayer el secretario de Bioeconomía, Fernando Vilella, anunció que el gobierno nacional impulsará el incremento de las retenciones a las exportaciones para un conjunto de sectores productivos. En principio, elevará dos puntos porcentuales, a 33%, la alícuota que pagan los subproductos de la soja, como harina y aceite, y a 15% la tasa que pagan el complejo cerealero, girasol y carne. En cambio, seguirán sin pagar derechos de exportación 18 economías regionales.

La decisión de avanzar con este proyecto, que debe ser tratado por el Congreso, generó rispideces con distintos sectores de la cadena agroindustrial y también con el gobierno de Santa Fe, que hasta ahora se venía mostrando alineado con la Nación (ver aparte).

Vilella se reunió el lunes con los representantes de la mesa de enlace agropecuaria y del Consejo Agroindustrial Argentino (CAA). El funcionario les planteó una serie de modificaciones a la intención inicial de gravar a todas las economías regionales al 15%.

En un anuncio por redes sociales, Bioeconomía comunicó la suba de la alícuota del 31% al 33% para los subproductos de la soja. Esto quiere decir que se elimina el diferencial arancelario que incentiva la industrialización del poroto de soja. Por otra parte, la cartera señaló que se mantendrá el esquema de retenciones cero (0%) para los siguientes productos: olivícola, arrocero, cueros bovinos, lácteos, frutícola (excluido el limón), hortícola, porotos, papa, ajo, garbanzos/lentejas/arvejas, miel, azúcar, yerba mate, té, equinos, lana. Para el sector vitivinícola la disminución es una alícuota del 15% hasta el 8%.

Según señalaron referentes del CAA, el gobierno dijo que “se revisará” la situación de los complejos porcinos, pesca, maíz y pisingallo. Queda firme, en cambio, la decisión de aumentar la alícuota para maíz, trigo, girasol y carnes, entre otros complejos.

El Consejo Agroindustrial Argentino no quedó del todo conforme. “Más allá de la comprensión por la delicada situación de las cuentas públicas reiteramos la necesidad de adoptar una política exportadora que contemple un esquema impositivo que fomente la producción y el agregado de valor”, dijo. Y pidió desarrollar un cronograma de eliminación de derechos de exportación, como también considerar la situación de las economías regionales.

El proyecto que el Ministerio de Economía enviará al Congreso recoge parcialmente a los reclamos que hicieron las entidades agropecuarias. “Luego de un intenso trabajo hemos estado buscando un camino alternativo a la decisión que se había comunicado la semana pasada, en torno a los derechos de exportación, básicamente centrados en las producciones regionales y los lácteos”, dijo Vilella en un mensaje grabado.

Hasta el momento la devaluación permitirá compensar cualquier incremento de exportaciones por el achicamiento de la brecha cambiaria. De todos modos esta mejora competitiva podría agotarse rápido por el impacto de la inflación que recortaría el poder de compra de los consumidores y por ende, de las cadenas productivas.

De todos modos, el sector fue beneficiado por las políticas implementadas por el gobierno anterior. Un informe de la Bolsa de Rosario indica que de los 365 días que marca un año calendario, en 238 días (el 70%) existió un tipo de cambio diferencial para el agro.

El sector de Economías Regionales de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (Came) celebró la decisión oficial de elevar al Congreso nacional la eliminación de los derechos de exportación para algunos complejos de las economías regionales.“Es una medida que en primera instancia va a llegar a los que proveen la mesa de todos los argentinos. Además, y por sobre todo, va a contribuir a achicar las asimetrías existentes y a alcanzar un país más federal”, expresó el presidente de la entidad Alfredo González.

Por su parte, desde la Cámara de la Industria Aceitera y del Centro de Exportadores de Cereales (Ciara-CEC), criticaron la suba de retenciones a los subproductos de la soja, al considerarla que “es una muy mala noticia para la economía del país”.

“La principal industria exportadora se verá castigada y eso va a limitar severamente el flujo de divisas y atentará contra el empleo industrial de la soja. La industria siempre pidió igualdad tributaria y esos dos puntos eran un reconocimiento, que ahora el gobierno rompe”, se quejó la entidad. (Fuente: La Capital)