Industriales de Santa Fe salen a contratar personal pero faltan operarios

Técnicos electrónicos y mecánicos, lo que más escasea. ¿Por qué? Estrategias para formarlos y pujas entre empresas. Asoman debates por cambios en legislación laboral.

Corresponsalía Santa Fe

La escena se repite mucho. Una industria metalmecánica de la región invierte fuerte en la compra de una nueva maquinaria o en la construcción de una nueva nave. Como tiene buen nivel de ventas, aprovecha que tiene dólares guardados o que hay financiamiento accesible (créditos en bancos oficiales con tasa subsidiada) para invertir y poder aumentar la producción.

Es más, la alta inflación genera tal distorsión de precios relativos que hace que el valor de los activos físicos esté comparativamente bajo. No en vano todas las industrias -sin importar el tamaño- están aprovechando ahora para capitalizarse y por eso se acumulan en los medios las noticias de plantas sumando infraestructura y equipos.

Hasta ahí el negocio viene redondo. Pero una fábrica no vive de la inversión sino del flujo de su actividad. Y ahí es cuando empiezan los problemas. Algunos provocados por las dificultades en la provisión de insumos (sobre todo importados), una escasez que -teóricamente- puede llegar a solucionarse rápido con una macroeconomía un poco más ordenada. Pero hay otro escollo más estructural y por eso mucho más preocupante por lo difícil de poder solucionar (o al menos acomodar) en el corto plazo. ¿Cuál? No se consiguen operarios industriales.

Faltan operarios

“No se encuentran operarios calificados como técnicos electrónicos y mecánicos. La industria los pide, pero la oferta disponible en el mercado laboral no alcanza”, señalan desde una posicionada agencia de recursos humanos.

“Se van consiguiendo de a uno o de a dos operarios cuando la demanda de una empresa es de a 10 o de a 20”, detalla. “No estamos hablando de un ingeniero con 5 años de experiencia. Estamos hablando de un joven recién salido de una tecnicatura”, agrega el experto.

Números en alza

En el Gran Santa Fe la tasa de desocupación se ubicó en el 7% al cierre del cuarto cuatrimestre de 2021, de los registros más bajos en los últimos años. Por la recuperación de la economía, el desempleo fue casi un punto menor al del tercer trimestre del año pasado cuando había tocado 7,8% y lejos del 13,6% del mismo período de 2020. Y esa baja vino acompañada de un fuerte aumento de la tasa de actividad (46%) lo que genera solidez al proceso de baja de la desocupación.

“En la industria regional no exageramos si decimos que hay pleno empleo”, resalta un empresario local. “Es un proceso que se viene dando desde hace tiempo, pero se aceleró en el segundo semestre del año pasado. Y ese ritmo de demanda que no encuentra los talentos requeridos se mantuvo durante el primer trimestre de este año”, agregó.

“La tendencia de falta de operarios se mantendrá este año, pese a que el ritmo de la actividad productiva puede llegar a bajar un poco producto de los problemas económicos”, calcula el especialista.

Por su parte, hay cada vez más industrias que arman sus propias “escuelitas” para capacitación no sólo de los operarios sino de familiares o amigos de los trabajadores. Pero esa es una práctica que algunos industriales hacen a regañadientes y otros prefieren no hacerlo convencidos de que terminan capacitando operarios que luego se les van a otras fábricas.

Y eso es verdad que ocurre. Es que la competencia por los recursos humanos es tan fuerte que los operarios bien entrenados reciban ofertas de manera permanente y se vayan de una empresa con facilidad ante las mejores condiciones que les pueden ofrecer.

Tanta es la competencia que si hay algo que caracteriza el mercado laboral del sector es la alta rotación de los empleados. Una competencia que para las metalúrgicas es totalmente desigual cuando son las aceiteras las que se interesan por sus empleados ya que pueden ofrecer los sueldos más altos de la región.

Inflación e impuestos

El precio es el principal ordenador entre la oferta y la demanda. Ahora bien: si quieren conseguir operarios, la industria debería subir más los salarios. ¿Pero puede hacerlo? ¿Vale la pena para un industrial medianamente importante armar un segundo o tercer turno con empleados fijos para largarse a sustituir una importación si el año que viene asume un gobierno más liberal que le abre las barreras de manera irrestricta a los productos importados?

“Hay que ir de abajo hacia arriba. Ir logrando acuerdos y consensos sectoriales y regionales entre empresas y gremios que adecuen la normativa porque buscar los cambios desde una ley nacional, con todo lo que eso implica en el debate ideológico que se activaría, es entrar en un callejón sin salida. Es más, terminarían tallando más intereses ajenos a los de los empleados y empleadores, mucho menos si es un debate que viene impuesto por el FMI”, aventura un industrial santafesino que no oculta en las redes sociales su oposición a Juntos por el Cambio y el impacto negativo del gobierno de Mauricio Macri en la industria.

(ValorLocal)