La bolsa de Moscú reanudó parcialmente sus operaciones tras un mes de cierre: cayeron las acciones en dólares

En una reapertura muy controlada, solo cotizan las acciones de una treintena de empresas disponibles. EEUU considera que es un apoyo artificial que no representa un modelo duradero.

El mercado de acciones se reanudó parcialmente este jueves en la Bolsa de Moscú tras pasar un mes cerrada, una reapertura muy controlada debido a la imposición de sanciones sin precedentes por parte de los países occidentales debido a la ofensiva en Ucrania.

Durante esta reanudación parcial, con sólo las acciones de una treintena de empresas disponibles, el índice Moex, denominado en rublos, ganó un 10%, mientras que el índice RTS, en dólares, perdió un 4%.

El 24 de febrero, cuando entraron las tropas rusas en Ucrania, la bolsa se desplomó un 30% y 190.000 millones de dólares se evaporaron en un día. La Bolsa decidió el 25 de febrero suspender la mayoría de sus actividades.

El lunes, la bolsa inició una reapertura progresiva, retomando primero los intercambios de títulos gubernamentales.

El jueves, fueron propuestas las acciones de 33 grupos, entre ellos importantes empresas sobre las que pesan sanciones internacionales, como los grandes bancos Sberbank y VTB, y el gigante gasístico Gazprom.

Las autoridades tomaron medidas para que la reanudación del jueves no fuera demasiado ruda y esperaban una coyuntura favorable de las materias primas. También dedicaron una importante cantidad de fondos para sostener el mercado y prohibieron las transacciones con inversores extranjeros, en un primer momento.

“Rusia indicó claramente que iba a consagrar recursos gubernamentales a apoyar artificialmente las acciones de las empresas en bolsa. No se trata de un verdadero mercado ni de un modelo duradero, lo que solo subraya el aislamiento ruso”, dijo el director adjunto para la seguridad nacional en la Casa Blanca, Daleep Singh.

El último día bursátil hábil del MOEX fue el viernes 25 de febrero y permanecía por tanto cerrado desde el pasado 28 de febrero, cuatro días después de que el presidente ruso, Vladímir Putin, lanzara lo que él denomina “operación militar especial” en Ucrania.

Ese día, Rusia amaneció ya sabiendo que la Unión Europea (UE), EE. UU., Canadá y otros socios excluirían a algunos bancos rusos del sistema de comunicación interbancario internacional SWIFT, un golpe sin precedentes para aislar al país del sistema financiero mundial.

Antes del cierre del parqué, la Bolsa se había desplomado un 45 % y los principales valores se dejaron más del 58 %. (Fuente: Infobae)